jueves, 22 de mayo de 2008



Cada noche antes de acostarte,
Arrincona las preocupaciones.
Susúrraselas a un sobre
O anótalas en un diario guárdalas y olvídate de ellas
Por mucho que en ese momento creas que puedes solucionarlas
No es cierto
Se ve todo más negro
Más complicado
No planifiques la agenda mental de las obligaciones del día siguiente
Recuerda que estas cansado de todo el día
Vulnerable
Sin recursos
Mirándote a los ojos
Sin distracciones externas
No es el momento de preocuparte
Decide no preocuparte
Mañana todo será diferente
Tendrás más recursos
Más fuerza
Confía en ti.